Ya se acabó el verano y con él nuestro pequeño viaje gastronómico por el Medio Oriente de la cuenca mediterránea, aunque sólo por el momento. Hoy os traemos uno de mis untables favorito, el paté de berenjena más exótico, delicioso y que pega con todo: el mutabal.

Este plato tan sencillo de preparar, básicamente es un puré de berenjena que se aliña con especias básicas y se come sin cubiertos, simplemente mojando con panes tipo pita y demás, como un estilo a los hummus o a la muhammara que ya os hemos ido enseñando. Pero es que además lo puedes usar como salsa en los bocadillos y queda de escándalo con las barbacoas, sobre todo con carnes muy especiadas ya que hace un contraste muy atractivo con el sabor meloso y dulzón de la berenjena.

Aquí en el sur aún nos queda mucho verano por disfrutar y comidas al exterior que saborear, así que continuamos con nuestro viaje por Turquía y hoy os presentamos al kisir para que veáis que hay vida más allá del tabulé.

En realidad, ésta es la ensalada veraniega más consumida en Turquía con un sabor más intenso y ligeramente picante que el tabulé, pero igual de refrescante. Lo que más la caracteriza es su color rojizo ya que incluye pasta concentrada de tomate y pimiento, que allí son fáciles de encontrar comercializadas pero como aquí no hay de pimiento,  pero puedes hacerlo tú mism@ o usar sólo concentrado de tomate. 

Aunque la receta que os traemos hoy es de origen Sirio, concretamente de Aleppo, por desgracia no es un lugar que se pueda visitar ahora, tan desolado por las guerras e intereses políticos. Pero aún en la distancia podemos disfrutar de su magnífica gastronomía.

Es una pasta muy popular en todo el Oriente próximo y perfectamente puede rivalizar con el hummus.